Tras un mes de lluvias continuas y mucho viento este domingo por fin se abrió una pequeña ventana de buen tiempo que me permitió tomar una clase más.
El pronóstico era de vientos de 12km/h y rachas de 25km/h Cuando llegué a las 09:00 la manga estaba caída y no se movía nada de viento pero algo en mi interior me decía que los metereólogos no se equivocan tanto. A medida que íbamos preparando todo la situación fue cambiando y comenzó a soplar con más fuerza un viento proveniente del suroeste. Este es el metar de Cuatro Vientos:
La clase de hoy iba a ser un reto, por un lado ya se veía que iba a ser un vuelo movidito y por otro debido a la dirección del viento habría que usar la pista 21 que al ser en pendiente hacia abajo requiere ser muy fino en la toma. Además, como la configuración habitual es la 03 con vientos predominantes en la zona del norte tampoco estoy acostumbrado a usar la 21.
Despegamos y nada más levantar el vuelo ya empezó a requerir de correcciones continuas de la barra, sin duda unas condiciones ideales para practicar. Después una vez alcanzada la cabecera de la pista, motor a ralentí y a realizar espirales pasando por encima del cementerio (rara sensación) para aterrizar en la pista.
La primera espiral me quedo corto y aterricé rozando los yerbajos de la cabecera, las siguientes algunas mejor que otras e incluso e una frustrada por llegar muy alto. Si duda mucha acumulación de trabajo entre las turbulencias, la pista y espirales nuevas que no me dejó con un buen sabor de boca del todo.
El domingo la previsión ya empeoraba aunque parecía que nos iba a dar tregua para volar un rato. De los 7km/h del sábado pasaba a 14km/h y a lo largo de la mañana el viento iría virando al este.
Cuando llegue al campo sobre las 09:00am ya se notaba la manga de viento con vida propia. Nadie había salido todavía así que seríamos los primeros en probar las condiciones allí arriba. Preparamos el trike y nos fuimos a la cabecera de la 03. Como ya tengo muchos videos practicando las espirales no creí necesario llevarme la gopro. Menudo error porque finalmente las condiciones no eran nada buenas y pasamos de una clase de espirales a unas lecciones de vuelo y aterrizaje con viento cruzado que fueron una delicia. Tras diez minutos de tomas y despegues aterrizamos para cambiarnos de posición poniéndome yo detrás y volvió a despegar Juan Luis para que viera mejor la técnica. Recordar que los Trike pendulares no disponen de timón de dirección para contrarrestar la deriva en viento cruzado por lo que requieren de bastante maña entrando por la pista en diagonal encarados hacia el viento para en el último momento enderezar el ala y posarte sobre el campo. Todo un ejercicio de destreza.
Este es el track del vuelo. Si se comparan las velocidades con otros días se puede ver como las tomas las hicimos con mayor energía para tener control sobre las rachas y viento cruzado.
Aquí dejo un video de Youtube con un ejemplo de tomas con viento cruzado en un trike para que os hagáis una idea.
Después del vuelo nos fuimos a desayunar unos cuantos. Hay que ver lo bien que sienta un buen café con leche y croissant después de un vuelo ajetreado.
A la vuelta, andaba Manolo y Luis con su X-Air, Pollito para los amigos. Están preparando una página web muy interesante que aunque aún está en fase de desarrollo ya permite ver algunas cosas y que promete hará las delicias de todos los que nos gusta esto de los ultraligeros. Les dejé la cámara y la pusimos sobre la cabina. Pronto podremos ver la grabación de todas las tomas y despegues que estuvieron practicando con viento cruzado. Hasta intentaron alguna por la pista cruzada del campo.
Para finalizar os dejo una foto que tenía pendiente. La tomé el fin de semana pasado que no pude volar por fuertes rachas de viento mientras volvía hacia mi casa. Como se aprecia en la imagen hay una gran cantidad de nubes sostenidas sobre la Sierra de Guadarrama y una nube lenticular en el sotavento de la montaña. Un claro sintoma de onda de montaña, descendencias y viento turbulento:
Con esto termino la crónica de este fin de semana. Muy divertido y esperado después de tantos días sin subirme a un avión por el mal tiempo. Esperemos que pronto podamos repetir.
Por fin este fin de semana he podido volar tras casi dos meses de mal tiempo. La previsión para el sábado era buena y una vez en el campo fue muy parecida al metar de Cuatro Vientos:
METAR LEVS 020900Z VRB02KT CAVOK 05/M00 Q1018=
Eran las 09:00 y ya estaba en el hangar vistiéndome y preparando la GOPRO mientras Juan Luis, el instructor, terminaba de preparar el trike. Esta vez iba a llevar la cámara en la cabeza. La idea es ir probando diferentes vistas para ver la más óptima.
Como soplaba del noreste me dirigí a la cabecera de la 03, paré en el umbral de la pista para subir a 3500 vueltas y conseguir los 70 grados de rigor. Antes de irme al aire visualicé durante un instante los movimientos antes de ejecutarlos, me alinee en el lateral izquierdo buscando el terreno más compacto y dando todo gas nos fuimos al aire mientras me llevaba la barra a la izquierda para compensar el giro de la hélice en el despegue. Que ganas tenía. Esto engancha pero bien. Fui ganando altura mientras iba completando el circuito de viento en cola derecha de la 03. Cuando llegue a la vertical de la pista ya me encontraba a 120m AGL y corté gas para iniciar mi primera espiral a derechas. Es indescriptible la sensación que produce el planeo, descendiendo metro a metro mientras viras buscando la vertical de la pista, sintiendo toda la energía del ala en tus manos y todos los cambios de velocidad sobre las mejillas para finalizar como si de un baile se tratara posándote sobre los primeros metros de la pista en un ejercido de coordinación absoluta, sin tocar el motor y llegando a la velocidad y altura correcta. Un ejercicio muy completo que aúna prácticamente todas la habilidades requeridas en esto de los trike pendulares.
Tras por lo menos ocho espirales intercaladas entre derecha e izquierda hicimos la toma final y salvo un fallo que me quedé alto y tuve que abortar el aterrizaje el resto me salieron más o menos decentemente. Qué bien se siente uno cuando las cosas le van saliendo.
Tras por lo menos ocho espirales intercaladas entre derecha e izquierda hicimos la toma final y salvo un fallo que me quedé alto y tuve que abortar el aterrizaje el resto me salieron más o menos decentemente. Qué bien se siente uno cuando las cosas le van saliendo.
Después de la clase aprovechando que no tenía compromisos familiares pude disfrutar el resto de la mañana pajareando por el campo y disfrutando de lo lindo hablando con unos y con otros.
Como Manolo estaba a punto de salir con su minitrike pude instalarle la gopro en la quilla del ala y este es el resultado:
Después, Santi estaba a punto de salir con su SkyRanger y me invitó a unirme a él. ¡Menuda mañana más productiva!, lástima que no tenía la cámara conmigo pero pude hacer algo con la del móvil y aquí está el resultado. Un precioso paseo por los aledaños de Villanueva disfrutando de los bonitos contrastes de colores que nos brinda el campo por esta época:
Para terminar, os muestro alguna que otra foto que fui tomando a lo largo de la mañana. Como os digo un día aeronáutico para recordar.
